El gran anhelo de todo buscador de la Verdad, es encontrar el camino hacia la Luz; es continuar el sendero trazado por los viejos buscadores de lo ETERNO: Los buscadores de la ILUMINACIÓN; del AMOR ETERNO...
Cada piedra en el camino, es una experiencia que promete un cierto aprendizaje; para así, luego, al haber esta misma sido comprendida, lograr volcar lo aprendido a cada persona que esté ante la necesidad de tener que pasar cierta prueba...; en definitiva, nos habilita la posibilidad de brindar una mano a quien más necesita.
Cuanto más el Hombre pruebas pase, más será el conocimiento que adquiera; dando así su mejor y efectiva ayuda; siempre y cuando, este conocimiento de Vida que adquirió, sirva como verdadero aprendizaje. El conocimiento sin SABIDURÍA, solo es conocimiento; dando como resultado, el empobrecimiento de sea cual fuere la aplicación.
Todos, de alguna forma, le escapamos a la experiencia, que varias veces, resultan ser muy dolorosas; estas mismas, son las mejores lecciones de Vida que contamos para un mejor aprendizaje en este "Gran Escenario".
Por ello, cuanto más rápido sea nuestro aprendizaje en el “Camino de la Vida”, más Brillante NUESTRA luz interior SERRA, por ende, más potente será nuestra FE y AMOR A DIOS...
Habremos logrado ganar esta gran batalla: La LUZ reinará colmando el corazón; el dolor dejará de existir, ¡para no aparecer jamás!
Es obvio que este es un gran esfuerzo, porque equivale dejar muchas cosas de lado, intereses que marcan nuestras vidas en lo cotidiano. Es equilibrar nuestros dos estados: El físico y el espiritual. Es comprender y aprender a no vivir para lo físico; sino, VIVIR con lo físico para el espíritu, los dos fusionados en uno...
¿Cuántas veces nos habremos preguntado: De dónde venimos; hacia dónde vamos?...
Yo me respondo: Si venimos de dónde venimos y retornamos de la misma forma que vinimos, o sea, “Con un papiro bajo el brazo”; solo me resta comprender que ese tal papiro, será la historia escrita a lo largo de toda mi existencia; de la cual, seré responsable de mis actos y obligaciones, debiéndome presentar, ante los “OJOS DE MI PADRE” .
Todo ello, definirá el grado de aprendizaje que habré obtenido, en este “Gran Escenario Escuela”. Este arte de aprender y aplicar las Leyes Básicas de Convivencia, basadas en el AMOR, nos mostrará nuestra propia Luz Interior... La Luz a la que se hace referencia, es solo ""Visible" con los "Ojos del Corazón”; sólo la verán aquellos que tengan “Ojos para ver”, que tengan un “Corazón Abierto “hacia las más sanas FANTASÍAS: Aquellos los de “Corazón de Niño”...
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